Gigabot, pese al gran daño recibido aún seguía siendo un
duro rival y aunque su rival golpeaba su punto débil, no bastaba para detener
el paso de la bestia metálica.
Por el otro lado la lucha entre el humanoide y el robot ha
comenzado; aquel no mostraba ningún
signo de debilidad, por el contrario le estaba poniendo las cosas realmente
difíciles al AK155. Al parecer el gran poder que poseía el científico era el de
dominar los elementos.
-
Termine
la fase de calentamiento, ahora serás testigo de los poderes del humanoide más
poderoso de todo el universo – Advirtió Silverman
-
No me
hagas reír, vamos muestra todo lo que tienes - Contesto el robot
La batalla tomo un tono más feroz con el AK155 ejecutando
disparos Blas, aunque su contrincante uso un campo de fuerza para repeler los
ataques. Acto seguido, con su lado robot elevo su brazo, en la palma de la mano
tenía un agujero donde disparo una enorme bola de fuego sin esfuerzo; esto tomo
de sorpresa al AK155 que apenas pudo cubrirse
para minimizar el daño. Por desgracia, las consecuencias para él fueron
devastadoras, casi todo su armazón se había derretido dejando entrever su esqueleto.
Por otro lado a batalla entre Arbot y Gigabot parecía algo
de nunca acabar, uno estaba con su punto débil visible pero el otro estaba
comenzando a sentir la dura batalla, por ende su movilidad estaba reducida en
un gran porcentaje. Aprovechándose de
eso, su rival, cargo todo lo que le quedaba de energía
-
Esto se
acabo chatarra obsoleta, esta vez no podrás detener este ataque ya que si Lo
haces, no quedara nada de ti ¡Estas acabado! – Exclamo el poderoso robot
Silverman se distrajo tras el anuncio de su robot y con las
pocas fuerzas que le quedaban AK155 le dio un gran golpe en el rostro humano
del doctor.
-
¡Me has
vuelto a lastimar grandísimo idiota!, ¡¡¡Furia Ígnea!!! - anunció su ataque el científico
-
Arbot, has
que mi sacrificio no sea en vano, me deja tranquilo que todavía haya robots que
estén en contra de este sujeto; ha sido un honor pelear a tu lado oficial – dijo
en tono de despedida AK155
El mismo en un acto heroico corrió hacia la posición donde
se ubicaba Gigabot. Esto no fue visto por el humanoide que realizo su poderoso
ataque
-
¡Hasta
nunca hojalata! – dijo el doctor
El ataque fue realmente certero, el AK155 voló en mil
pedazos aunque el ataque golpeo indirectamente a Gigabot que se
desestabilizo anulando sin quererlo su
propio ataque. En ese momento Arbot corrió hacia su rival se inclino con su
rodilla izquierda y con el brazo derecho ejecuto su cañón de Blas al centro del
oponente atravesándolo de lado a lado
El grito del robot fue desgarrador, escupía plasma por la
boca
-
Me ha
vencido un AK155 ¿¡Como ha sido posible!? – se cuestionaba ya derrotado
Acto seguido, cayo ya totalmente desactivado; Arbot había
sido el ganador de la dura batalla pero aun quedaba alguien mas
-
¿Cómo te
has atrevido a destruir a mi Gigabot?, ¡Acabare contigo en este instante! – Exclamo
Silverman
Al momento de cargar su ataque, su lado androide comenzó a
fallar por lo que decidió dejar el campo de batalla
-
Arbot, o
como sea que te llames, esto no quedara así. Te destruiré así como hice pedazos
a ese mequetrefe que interfirió con mis planes; lamentaras haberme desafiado – Advirtió
Michael
Como si fuese magia despareció, al parecer tenia la
habilidad de transportarse a su base.
El oficial observaba con una profunda tristeza, los pedazos
de su compañero de batalla. Aunque observo que su chip milagrosamente estaba
entero, lo tomo entre sus manos y pese a que su compañero le había pedido no
repararlo le iba a pedir a Alex que lo hiciera. En ese momento de reflexión la
maquina escucho
-
¡Arbot! –
Era Clementine que sorprendentemente le dio un fuerte abraso
al verlo vivo y para su asombro triunfal, el robot no entendía demasiado pero
al ver a su compañera contenta se alegro el también
-
No puedo
creerlo, Arbot ¡Has derrotado a Gigabot! – Dijo Alex
-
No, lo
hubiese hecho solo Alex tenlo por seguro – Contesto el androide
-
¿De quién
son estas partes destrozadas Arbot? – Pregunto Adrian
-
Son del
AK155, Silverman lo hizo – Replico el robot
-
¿Silverman
estuvo aquí? – Cuestiono Clementine
-
Así es y
de no ser que se quedo sin fuerzas me hubiese liquidado a mi también, creo que
tuve suerte esta vez; me temo que es realmente poderoso ya que domina los
elementos del planeta a su antojo – Explicaba su compañero
-
Vamos
Arbot, necesito repararte esos daños, te han hecho trizas mi amigo – Intervino
el oficial Gray
-
Alex,
cúmpleme un capricho ¿podrías insertar este chip en algún robot que tengas?
podríamos volver a AK155 a la vida – Pidió Arbot
-
MMM…
veremos qué podemos hacer, vaya Arbot me tienes atareado –
Todos estallaron en risas, el robot también pregunto por
Steve y le dijeron que aun estaba recuperándose en el hospital. Finalmente
todos volvieron a la departamental que por suerte fue reparada, en ella estaba
Mark Giovanni que le recordó a Arbot lo que hizo, pero entendió que todo fue
para salvar a Magentia.
También los oficiales entendieron que esto es solo el
comienzo de una larga serie de luchas.
FIN
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